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Publicado el 21 de abril de 2025

John McClane y Jason Bourne, dos héroes unidos por el Cineróscopo

Marina Such

Periodista especializada en series, aunque en otra vida también escribió sobre baloncesto y astronomía.

Si dos héroes de acción del cine reciente como John McClane y Jason Bourne tuvieran signo del zodíaco, serían claramente Tauro. Por eso, el Cineróscopo de abril se cierra con ellos.

¿Por qué encajarían en ese signo y no en otro? Porque son pragmáticos y decididos, con una gran fuerza de voluntad, y de ideas fijas: si toman una decisión, la van a seguir hasta el final, cueste lo que cueste. Es, desde luego, un signo apropiado para personajes que deben enfrentarse a retos que, a priori, parecen imposibles. Son también nobles y seguros, por lo que dejar en sus manos una pelea contra un hacker aparentemente invencible y unos programas clandestinos de la CIA es una buena apuesta.

John McClane en el siglo XXI

El caso de John McClane es curioso porque es un héroe nacido en el siglo XX, a mediados de los 80, cuando las amenazas terroristas eran, en el cine, siempre las mismas. Es cierto que, en su primera aventura, se enfrentó a un brutal grupo de atracadores liderado por un alemán, lo que era algo diferente a lo habitual en las películas de acción de la época, pero ya en La jungla de cristal quedó claro que McClane es duro de pelar, y que tiene recursos para todo.

En la cuarta película de la saga, La jungla 4.0, de 2007, se enfrenta a una de las acciones terroristas más definitorias del siglo XXI: un ciberataque a gran escala a cargo de un brillante y maquiavélico hacker. Curiosamente, la película, dirigida por Len Wiseman, se inspiraba en un reportaje de la revista Wired sobre la nueva guerra de la información y del ciberespacio que se abría a finales de los 90, un terreno muy nuevo para un McClane más acostumbrado a liberar rehenes en rascacielos o a buscar a delincuentes en una carrera contrarreloj en medio del caluroso verano neoyorquino.

¿Las armas del personaje interpretado por Bruce Willis para salir de esta? Las de siempre; tenacidad, rapidez mental y algo de sarcasmo.

El reto de Jason Bourne

La tenacidad es una característica que comparte con Jason Bourne, el agente especial caído en desgracia a quien da vida Matt Damon. A lo largo de las cuatro películas protagonizadas por él, su objetivo ha sido siempre el mismo: recuperar su memoria e identidad y, al mismo tiempo, acabar con quienes montaron los programas secretos en la CIA que lo crearon a él y a otros muchos agentes que viven y operan entre las sombras.

La capacidad de Bourne para seguir adelante pese a las pérdidas personales y a la aparente omnipotencia de sus enemigos alcanza su culmen en El ultimátum de Bourne, la tercera entrega, dirigida por Paul Greengrass. Esta vez, está muy cerca de destapar no solo a Treadstone, el programa del que él formaba parte, sino también a su sucesor, Blackbriar, aún más brutal en la modificación del comportamiento y el cuerpo de sus integrantes, y cuyos líderes han puesto precio a su cabeza.

Así que la labor de Bourne es doble, huir de los asesinos que lo persiguen y llegar hasta el jefe último de todo para obtener respuestas y liquidarlo todo. Consigue superar todos los obstáculos en su camino porque es tan obstinado y obsesivo como solo pueden los tauro y, de paso, revitaliza el género de acción con sus espectaculares peleas, siempre ancladas en lo que Bourne tenga a mano, y en ese protagonista que se enfrenta a sus teóricos compañeros y jefes, que se han vuelto contra él.

McClane y Bourne muestran un tipo de héroe marcado por su sentido de lo que es correcto, por su capacidad de sufrimiento para conseguir su objetivo y por el convencimiento de que no dejarán que los malos de la historia se salgan con la suya. Cueste los que cueste.

‘La jungla 4.0’ y ‘El ultimátum de Bourne’ se emiten el 26 de abril, dentro del Cineróscopo dedicado a Tauro, en AXN.